5 de febrero de 2024 Editorial de The Socialist, periódico semanal del Partido Socialista (Comité por una Internacional de Trabajadores CIT Inglaterra y Gales)
Imagen: Protesta en Londres contra la guerra en Gaza. Foto de : Paul Mattsson
Días después de que la Corte Internacional de Justicia de la ONU en La Haya dictaminara que Israel debe tomar todas las medidas para prevenir actos genocidas en Gaza, las fuerzas israelíes continúan sus bombardeos asesinos desde tierra y aire. “Hague Shmague”, el Ministro de Seguridad Nacional de extrema derecha de Israel publicó en X tras el fallo provisional.
También se ha ordenado a Israel que lleve ayuda básica a Gaza. Desde entonces, los gobiernos británico y otros han seguido a Estados Unidos al suspender los pagos a la agencia de ayuda de la ONU para los refugiados palestinos. ¿Cuántos palestinos más morirán como consecuencia?
Ahora, con tres militares estadounidenses asesinados en una base aérea estadounidense en Jordania, el presidente estadounidense Joe Biden promete “hacer que todos los responsables rindan cuentas en el momento y de la manera que elijamos”. La propagación de la guerra y la inestabilidad en la región significa más miseria para la clase trabajadora y los pobres.
La visión de los terribles horrores llevados a cabo por las FDI expone la podrida brutalidad del sistema capitalista y está radicalizando a sectores enteros de trabajadores y jóvenes en todo el mundo. La amenaza de que se desarrollen movimientos de masas en Medio Oriente, como los de la Primavera Árabe de 2011 que derrocó a dictaduras, aterroriza a las clases dominantes en la región y en todo el mundo.
El movimiento contra la guerra, formado por millones de personas, aumenta la presión sobre el gobierno israelí para que detenga sus brutales ataques. En Gran Bretaña, las protestas masivas ya han destrozado el cuero cabelludo de la odiada Ministra del Interior, Suella Braverman. También figuran en los cálculos de la clase dominante israelí. «Hay enormes manifestaciones en las capitales occidentales… necesitamos ejercer contrapresión», ha dicho Benjamín Netanyahu.
El Partido Socialista está ayudando a construir y fortalecer el movimiento y aumentar la presión de la clase trabajadora sobre todos los políticos capitalistas que contribuyen al horror.
Organizar la acción sindical
Las huelgas que han arrasado el país en los últimos 18 meses dieron una idea del poder que tiene la clase trabajadora organizada. El movimiento sindical británico, que cuenta con más de seis millones de miembros, aún no ha puesto todo su peso detrás del movimiento contra la guerra. Los bloques sindicales en las manifestaciones nacionales han sido modestos, aunque inevitablemente decenas de miles de sindicalistas más han estado entre los cientos de miles que marcharon.
Se ha convocado un “día de acción en el lugar de trabajo” para el 7 de febrero, fomentando protestas y reuniones a la hora del almuerzo. Los dirigentes sindicales están bajo presión. Los sindicatos NEU, UCU y PCS han brindado su apoyo a nivel nacional; los líderes del PCS habían rechazado previamente propuestas para hacer más (ver ‘Red de Izquierda Amplia PCS: ‘Nuestro sindicato debe ser más fuerte en Gaza’).
Las discusiones en el lugar de trabajo son un buen punto de partida para prepararse para futuras acciones de los trabajadores. Ha habido una serie de protestas afuera de las fábricas de armas en los últimos meses con el objetivo de detener la producción, pero hasta ahora, esto se ha limitado a protestas afuera y no a los propios trabajadores organizando paros.
Hay una historia de acción de los trabajadores contra la guerra en Gran Bretaña. Los ejemplos incluyen: los portuarios de Londres que se niegan a enviar armas para usar contra la revolución rusa, los ingenieros de Rolls Royce que se niegan a trabajar en motores a reacción destinados a ser utilizados por el dictador militar chileno Pinochet, y los trabajadores de la refinería de petróleo en el puerto de Ellesmere que se niegan a descargar petróleo ruso después de la invasión de Putin a Ucrania.
Levantar huelgas de estudiantes
Estudiantes de escuelas, colegios y universidades ya han organizado huelgas y protestas contra el asedio a Gaza. Los miembros del Partido Socialista forman parte de Estudiantes Socialistas, una organización nacional que está ayudando a organizar nuevas huelgas.
¿Puedes organizar una protesta en tu escuela o universidad? ¡Ponte en contacto!
Ven a la conferencia nacional de Estudiantes Socialistas en Birmingham el sábado 10 de febrero para discutir con otros cómo construir la lucha.
Ayúdenos a construir la posición electoral socialista y contra la guerra
En cada etapa de los más de 100 días del horror de Gaza, el líder laborista Keir Starmer se ha hecho eco del conservador Rishi Sunak, quien a su vez ha seguido al presidente estadounidense Joe Biden respaldando el terrorismo de Estado israelí.
Sunak también se ha unido a Biden en el bombardeo de Yemen, poniendo en riesgo aún más vidas civiles. Los ataques no lograrán su objetivo declarado de detener los ataques hutíes en el Mar Rojo; Arabia Saudita los ha estado bombardeando durante casi una década con el respaldo de Estados Unidos y el Reino Unido.
Los parlamentarios británicos no tuvieron voz y voto sobre los ataques aéreos, pero Starmer participó y dio su aprobación. No es de extrañar que el odio hacia él y hacia Sunak esté tan extendido en las protestas de Gaza. La gente pregunta: ¿Por quién puedo votar en las elecciones generales?
El Partido Socialista está haciendo campaña para que se presente una lista de candidatos de los trabajadores, respaldada por los sindicatos, que podría incluir a personas como Jeremy Corbyn, Dianne Abbot y Emma Dent Coad, así como activistas comunitarios y contra la guerra. Estamos empezando ahora los preparativos para nuestra postura como parte de la Coalición Sindicalista y Socialista en las próximas elecciones generales y en las elecciones locales de mayo. Y hacemos un llamado a otros activistas contra la guerra para que nos apoyen (visite tusc.org.uk para ver la plataforma política central).
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